EL CONTENDOR POR LA FE

Dedicatoria:



A la Revista Evangélica homónima que se publicó entre los años 1924 al1993. A sus Directores y Redactores a quienes no conocí personalmente, pero de quienes tomé las banderas, para tratar de seguir con humildad el camino de servir a Dios trazado en la revista durante casi 70 años.



sábado, 22 de febrero de 2014

MI YUGO ES FÁCIL, Y LIGERA MI CARGA


Por El Contendor

 

Mateo 11:28  Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.

Mateo 11:29  Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas;

Mateo 11:30  porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

 

De acuerdo con la definición de yugo que da el diccionario bíblico:

Barra de madera o armazón que se coloca sobre el cuello de dos animales de tiro (generalmente reses vacunas) para que tiren de un apero de labranza o de una carreta o carruaje. (Nú 19:2; Dt 21:3; 1Sa 6:7.) En este último caso solían sujetarse por medio de dos tiras, que rodeaban el cuello del animal. Algunos yugos, en vez de tener tiras, estaban atravesados por estacas que bajaban por ambos lados del cuello de los animales y se ataban con correas en torno a la garganta. En ocasiones, los yugos se sujetaban a la base de los cuernos del animal.

 

 

 

Los términos griegos (zy·gós, zéu·gos) que transmiten la idea de un yugo se derivan de la palabra zéu·gny·mi, que significa “enyugar; uncir; juntar; atar; unir entre sí”. Generalmente se uncían entre sí dos animales, por lo que la palabra griega zéu·gos puede significar un “par” o “yunta” de animales.

 


Los esclavos a menudo tenían que llevar cargas (compárese con Jos 9:27; 1Ti 6:1), y por esta razón el yugo representaba apropiadamente una condición de esclavitud o sujeción a otra persona, como la sujeción de Esaú a Jacob (Gé 27:40) o la sujeción a un gobernante o nación (1Re 12:4-14; 2Cr 10:4-14; Eze 34:27), así como un estado de opresión y sufrimiento. (Isa 58:6-9.)

Un yugo de hierro denotaba una esclavitud más severa que un yugo de madera. (Dt 28:48; Jer 28:10-14.) Y quitar o romper el yugo significaba liberación de esclavitud, opresión y explotación. (Le 26:13; Isa 10:27; 14:25; Jer 2:20; 28:2, 4; 30:8; Eze 30:18.)

La Ley que Dios dio a la nación de Israel era un yugo, puesto que los colocaba bajo obligaciones y responsabilidades para con Jehová Dios. Como lo que la Ley prescribía era santo, justo y bueno, no obraba para perjuicio de los israelitas. (Ro 7:12.)
 
Sin embargo, no pudieron observarla a la perfección debido a su pecaminosidad e imperfección, y, por lo tanto, resultó ser un yugo que ni ellos ni sus antepasados fueron capaces de cargar (puesto que el quebrantarla resultó en condenación para ellos).
 
Este fue el argumento de Pedro al mostrar que no era necesario imponer a los cristianos gentiles la obligación de observar la “ley de Moisés”. (Hch 15:4-11.) La Ley misma no producía esclavitud, pero el pecado sí. (Ro 7:12, 14.)
 
Por lo tanto, el que alguien tratase de obtener la vida guardando la ley mosaica a la perfección no solo resultaría imposible, sino también le ‘restringiría otra vez en un yugo de esclavitud’, pues por ser pecador y esclavo del pecado, la Ley lo condenaría, una Ley que no proporcionaba ningún sacrificio verdaderamente efectivo por los pecados, como lo hacía el rescate de Cristo. (Gál 5:1-6.)

 

 
Comentario de William Barclay:

 
Jesús hablaba a personas que estaban tratando desesperadamente de encontrar a Dios, y tratando desesperadamente de ser buenas, pero que estaban encontrándolo imposible, y que se hallaban sumidas en el agotamiento y la desesperación.
Les dice: «Venid a Mí todos los que estáis rendidos bajo vuestras cargas.»
 
Para un judío ortodoxo, la religión era cosa de cargas. Jesús dijo de los escribas y los fariseos: «Atan cargas pesadas e insoportables, y se las ponen a los demás sobre los hombros» (Mat_23:4 ). Para un judío, la religión era cosa de reglas interminables. Se vivía en una selva de normas que regulaban todas las situaciones de la vida. Se tenía que estar escuchando constantemente: "No hagas eso.»

Hasta los rabinos se daban cuenta de eso.

Hay una clase de parábola lóbrega que se pone en boca de Koré, que muestra lo impositivas y pesadas e imposibles que podían llegar a ser las demandas de la Ley:
 
«Había una pobre mujer en la vecindad que tenía dos hijas y un campo. Cuando empezaba a arar, Moisés (es decir, la Ley de Moisés) le decía: "No debes arar con un buey y un asno juntos." Cuando empezaba a trillar, él le decía: "Dame para la ofrenda elevada, y el primero y el segundo diezmos." Ella se sometía a la ordenanza, y se lo daba todo. ¿Qué hizo entonces la pobre mujer? Vendió el campo, y se compró dos ovejas para vestirse con su lana y sacar algún provecho de los corderos. Cuando tuvieron los corderos, Aarón (es decir, el sacerdocio) vino y le dijo: "Dame los primogénitos." Ella cumplió la decisión, y se los dio: Cuando llegó el tiempo de esquilar, y se puso a esquilar sus ovejas, vino Aarón y le dijo: "Dame las primicias de la lana de las ovejas" Deu_18:4 ). Entonces ella pensó: "No puedo resistir a este hombre. Mataré mis ovejas y me las comeré." Cuando hizo la matanza, llegó Aarón y le dijo: "Dame la pierna, las quijadas y el cuajar." Deu_18:3 ). Entonces ella le dijo: "Ni siquiera matándolas estoy a salvo de ti. Pues, venga: las consagro por voto" Y entonces Aarón le dijo: "En ese caso me pertenecen enteras." Num_18:14 ). Y se marchó con ellas y la dejó llorando con sus dos hijas»

Esta historieta es una parábola de las demandas continuas que hacía la Ley sobre las personas en todas las circunstancias de la vida. Esas demandas eran, sin duda, una carga.

Jesús nos invita a tomar Su yugo sobre nuestros hombros. Los judíos usaban la palabra yugo con el sentido figurado de someterse a algo. Hablaban del yugo de la Ley, el yugo de los mandamientos, el yugo del Reino, el yugo de Dios. Pero puede ser que Jesús tomara las palabras de esta invitación de algo mucho más próximo a Su hogar.

Dijo: "Mi yugo es fácil.» La palabra fácil es jréstós en griego, que quiere decir realmente que encaja bien.
Los yugos de los bueyes se hacían en Palestina, de madera; se llevaba el buey al carpintero para que le tomara las medidas; luego se desbastaba la madera, y se llevaba otra vez al buey para probárselo: se le ajustaba bien, para que no le hiciera daño en la testuz al paciente animal. Es decir: que el yugo se hacía a medida, como una prenda de vestir, para que le encajara bien al buey.

 
Cuenta una leyenda que Jesús hacía los mejores yugos de bueyes de toda Galilea, y que iban a Su taller de todas partes a comprarle los yugos para los animales. En aquellos días, como ahora en muchos sitios, los talleres tenían lemas y carteles encima de la puerta; y se ha sugerido que los del taller de Jesús eran un yugo y la frase " MIS YUGOS ENCAJAN BIEN».

Es posible que Jesús estuviera usando aquí un cuadro de Su taller de carpintero de Nazaret en el que trabajó fielmente durante Sus años de silencio.

Jesús dice: «Mi yugo encaja bien.» Lo que esto quiere decir es: "La vida que Yo te doy no es una carga que te desuelle; tu misión está diseñada a tu medida para que te vaya bien.» Lo que quiera que sea que Dios nos proponga encajará exactamente con nuestras necesidades y habilidades.

Jesús dice: "Mi carga es ligera.» Como decía un rabino: «Mi carga se ha convertido en mi canción.» No es que sea siempre fácil de llevar; pero se nos impone con amor; se nos propone llevarla con amor; el amor hace ligeras hasta las cargas más pesadas.
Cuando recordamos el amor de Dios, cuando nos damos cuenta de que nuestra carga es amar a Dios y amar a nuestros semejantes, entonces nuestra carga se convierte en nuestra canción.
Se cuenta que un hombre se encontró una vez a un chiquillo que llevaba a cuestas a otro aún más pequeño, que era cojo. «Esa es mucha carga para que tú la lleves,» le dijo el hombre. Y el chiquillo respondió: "No es una carga, señor; es mi hermanito”.» La carga que se impone con amor y se lleva con amor es siempre ligera.

 

¡Con qué diligencia, con qué sublime amor nos llama y nos invita nuestro Salvador!

¡Con qué familiaridad nos dice: “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo”  (Apo 3:20).

Él ve al hombre fatigado, cargado, abatido,  con el yugo de hierro con el que Satanás lo ha uncido, lo ha  sometido a la esclavitud del pecado. Pero de su misericordia, de su compasión, de su amor sublime, surge la invitación amorosa “venid a mí”; y la invitación se extiende a “todos”, no sólo a los creyentes nacidos de nuevo, (que también estamos expuestos a las cargas y sufrimientos que provienen del mundo pero ya liberados por Cristo del yugo de Satanás), sino también la invitación se extiende al que aún no cree (Juan 3:18) porque éste está condenado y permanece atado al yugo del diablo.

Jesús te invita que vayas a Él, y sin excusas, con toda la sinceridad de tu corazón, reconozcas lo que eres: un pecador, esclavo del pecado. Y como tal, necesitas Su perdón, necesitas que te quite el pesado yugo de hierro de la condenación  con todas sus cargas y cadenas,  y descanses en sus amados brazos.

 Si vamos a Él tenemos la certeza de encontrar en sus brazos el refugio seguro y el alivio para todas nuestras heridas y todas nuestras fatigas.

“El que no está conmigo está contra mí” (Mateo 12:30) dijo el Señor. No hay neutralidad en esta guerra espiritual, (Efesios 6:12)  “porque no tenemos lucha contra sangre y carne,  sino contra principados,  contra potestades,  contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo  contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes”.

Esto significa que si el Señor nos ha liberado del yugo de la esclavitud de los “gobernadores de las tinieblas de este mundo”, ahora estaremos luchando junto a Él en la batalla contra las huestes malignas.

Pero antes debemos sujetarnos al Jesús que nos invita a llevar Su yugo sobre nosotros, para que aprendamos de Él la humildad y la mansedumbre de Su corazón.

Cuando se unen dos bueyes por el yugo, es para que ambos caminen juntos, trabajen juntos y se repartan las cargas. Caminando bajo el yugo de Jesús, aprendemos a caminar con Él y como Él, por sus mismos caminos, con sus mismos pasos,  y nadie podrá desviarnos del camino al Padre.

Además tengamos presente que el divino Carpintero, ha estado preparando ese yugo para nosotros. La madera es liviana pero fuerte.
Liviana para que no nos pese el llevarlo, y fuerte para que resista sin romperse por el tironeo de los que pretenden apartarnos de Él.

Además, lo ha estado trabajando con amoroso esmero, redondeando todas sus aristas para que ajuste sin lastimarnos.

Está hecho a nuestra medida, para cada uno de  nosotros,  porque Él nos amó primero, y conocía nuestra necesidad de aferrarnos a Él;  por eso su yugo es fácil y su carga ligera.

Yo le digo a todo aquél que aún no le ha abierto las puertas de su corazón al amado Carpintero:

No dejes tu yugo tirado al costado de tu camino, no tengas a menos el amor de Cristo, el camino es muy duro y lleno de peligros, hay densas tinieblas que lo cubren y para llegar a su final necesitas que Él te acompañe. ¡Vuélvete y deja que te amarre a Su yugo fácil y agradable para que nadie te pueda separar de Su amor!

 

Rom 8:35  ¿Quién nos separará del amor de Cristo?  ¿Tribulación,  angustia,  persecución,  hambre,  desnudez,  peligro o espada?

Rom 8:36  Como está escrito: 

 "Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; 

 somos contados como ovejas de matadero

Rom 8:37  Antes,  en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de Aquel que nos amó.

Rom 8:38  Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte ni la vida,  ni ángeles ni principados ni potestades,  ni lo presente ni lo por venir,
Rom 8:39  ni lo alto ni lo profundo,  ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios,  que es en Cristo Jesús,  Señor nuestro

lunes, 17 de febrero de 2014

EL ZORRO EN MEDIO DE LOS CORDEROS (El dominionismo encubierto)

Por El Contendor


Al referirme a los falsos pastores que dicen predicar el Evangelio de Jesucristo pero que es su lugar predican a su grey un evangelio adulterado, los he calificado como “lobos con piel de oveja”. Estos individuos ya estaban anunciados en la Biblia:

Hechos 20:28  Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.

Hch 20:29  Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño.

Hch 20:30  Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos.

 

Mateo 7:15  Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.

 

Juan 10:11  Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.

Jua 10:12  Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa.

 

Tal como nos muestra la Biblia, los lobos cuando alcanzan los rebaños producen estragos dispersión y muerte.

Pero peor aun cuando pasan inadvertidos en medio del rebaño (con piel de oveja).

El pastor que tenga cuidado de su rebaño seguramente se cuidará, y mucho, de invitar  a cualquier “prestigioso pastor evangelista” para aumentar la concurrencia a su “corral”, no sea que le resulte  el lobo disfrazado de cordero.

Continuando con el lenguaje pastoril, quisiera hacer una paráfrasis  y en lugar de la frase original “el lobo en medio de las ovejas” me gustaría explicar el sentido de esta otra: “El zorro en medio de los corderos”.

Como sabemos, siempre se ha utilizado la figura del zorro como símbolo de una persona perspicaz y astuta.

El cordero (según definición de la RAE) es el hijo de una oveja que tiene menos de un año. Es un animal manso, dócil e indefenso.

Los cristianos que aún no están suficientemente nutridos con la Palabra de Dios, son como los corderos o los niños recién nacidos:

 

1Pedro 2:1  Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía, envidias, y todas las detracciones,

1Pe 2:2  desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, PARA QUE POR ELLA CREZCÁIS EN SALUD, (*)

1Pe 2:3  si es que habéis gustado la benignidad del Señor.

(*)[versión RV 1909 opino más apropiada que RV 1960 “crezcáis para salvación”]

 

La leche espiritual no adulterada es el Evangelio de Jesucristo que nos lleva a crecer  en salud, nos inmuniza contra los ataques de las doctrinas extrañas y de los “virus” del mundo.

Ahora, si en medio del rebaño de ovejas y corderos hay un zorro oculto bajo una piel de oveja, ¡ay de ese rebaño!.

El zorro es más peligroso que el lobo.

Quizás alguien podrá dudar que el zorro se alimente de corderos y ovejas pero hay una noticia que lo prueba. En un diario de Rio Negro (Argentina),  del 10-04-2011 se publica esta noticia:

Productores ganaderos de una amplia zona de la Región Sur rionegrina buscan organizarse para combatir al zorro colorado para frenar la matanza de cordero y ovejas que está haciendo este mamífero carnicero que se ha convertido en plaga”.

Volviendo a la analogía con el reino animal, yo opino que el zorro en medio del rebaño es más peligroso que el lobo pues éste “arrebata a las ovejas y las dispersa”, es decir,  las que pueden escapar salvan sus vidas y pueden encontrar un buen pastor que las lleve para su rebaño.

Hay iglesias pentecostales donde se hacen tan evidentes las explosiones emocionales que producen el “mover del espíritu” (vaya saber uno qué espíritu), que para algunos concurrentes  que aún andan en los rudimentos de la Fe, el Espíritu de Verdad, que es el Espíritu Santo, los pone en alerta  de que lo que están haciendo allí, no es de Dios, y salen dispersados como ovejas que huyen por sus vidas.

Un domingo al atardecer paseaba con mi hijo pequeño (4 años) por la Plaza Miserere (Bs. Aires – Capital) lugar en el que acostumbraban a reunirse a predicar  diversos grupos de iglesias evangélicas. Ese día llamó mi atención un grupo bastante numeroso de personas y me detuve a escuchar.

El predicador, sobre una improvisada tarima, levantando una Biblia con el brazo bien arriba vociferaba tan alto que el equipo de sonido distorsionaba y sólo se podían distinguir los “aleluyas”, mientras que las personas, como en estado de trance, con brazos en alto, ojos cerrados y balanceando el cuerpo o girando sobre sí mismas, gritaban ¡amén! ¡amén!. Más tarde pude identificar esta misma actitud en todas las iglesias del pentecostalismo.

No me sentía cómodo en ese lugar y entre esa gente, y mucho menos mi hijo de 4 años que de pronto se echó a llorar señalando con su dedito hacia adelante, como si allí estuviera la causa de su llanto.   Sentí como un escalofrío y tomando a mi hijo de la mano salí huyendo de allí como si hubiera visto al mismo Satanás.

Esto ocurrió hace más de 30 años, pero el recuerdo de esa presencia  maligna no se ha borrado de mi mente.

En esa misma época yo comenzaba a caminar con el Señor;  me congregaba en la Iglesia Bautista del Once, y me había bautizado cuando pastoreaba esa congregación el pastor Dr. Daniel Tinao.

Estudiaba la Palabra de Dios en una vieja Biblia que había recibido como legado de mi Papá terrenal.

Escudriñaba las Escrituras para ver si lo que predicaban los que se reunían en la Plaza Miserere era conforme a la Verdad.

Era muy común que en dicha plaza predicara el Evangelio un grupo del Ejército de Salvación. Muchas veces, con mi familia, nos detuvimos a escucharlos y nunca nos sentimos incómodos, por el contrario, los pintorescos uniformes, y la banda tocando los himnos evangélicos clásicos y la predicación con el discurso moderado,  genuino y sin aspavientos me han llevado a considerarlos casi como hermanos en Cristo.

Y digo “casi” porque mi fundamentalismo bíblico me lleva a  reconocer que en ellos hay algunas costumbres que no son bíblicas: los uniformes, los grados al estilo militar, la predicación por parte de las mujeres, etc.

En todo caso, cuando sean juzgados ente el tribunal de Cristo, (como lo seremos todos los verdaderos creyentes), el mismo Señor evaluará si las costumbres no

bíblicas merecen una mengua o no de sus recompensas.

Valga lo dicho hasta aquí para concluir con esta “moraleja”: ya sea que nos consideremos como corderos u ovejas o aún “borregos silvestres” (cristianos inconversos) el Espíritu Santo, en algún momento, nos dará la voz de alarma, el discernimiento, para que nos enteremos que estamos en peligro ante el lobo con piel de oveja.

Otra experiencia similar a la que yo les relaté, la encontramos en un trabajo del pastor José Holowaty  sobre el pentecostalismo, cuyo tema completo lo hemos incluido en una publicación de El Contendor por la Fe el mes de marzo de 2011, bajo el título de “El pentecostalismo Parte I”.

Relata el pastor José Holowaty:

 

Quien esto escribe fue libertado por Dios del pentecostalismo hace muchos años. Un domingo en la mañana, en un culto pentecostal, un hermano pelirojo se levantó a leer el capítulo 14 de 1 Corintios. Yo lo escuchaba atentamente. De repente se levantó una mujer y comenzó a agitar los brazos y a "hablar en lenguas". Luego se levantó otro, y luego otro, y otro más, hasta que había nueve personas de pie que parecían nueve molinos de viento. Me convencí de que no querían escuchar la lectura de la Palabra de Dios. Pero a pesar del ruido y el alboroto que producían, pude escuchar claramente estas palabras: "Dios no es Dios de confusión, sino de paz... Hágase todo decentemente y con orden" (1 Co. 14:33,40). [Nota del traductor: Si el hermano Huling hubiese escuchado también los versículos 34 y 35 de la porción que se leía, con más velocidad hubiese puesto el pie en polvorosa aquel día]. El marcado contraste entre esta Escritura y el pandemonio que reinaba en mi entorno, fueron causa de que empezara a ver que el pentecostalismo no puede ser de Dios.

 

Nótese que la expresión que utiliza el pastor Holowaty  es “poner el pie en polvorosa” que significa huir. Es lo que hacen las ovejas cuando el lobo irrumpe en medio de ellas quitándose la piel de oveja.

 

 Pero el zorro en medio de los corderos trabaja de una manera mucho más sutil, imperceptible, asecha y engaña, los corderos reciben la leche espiritual adulterada (el falso evangelio) dulce al paladar pero que lleva al raquitismo del espíritu, y las ovejas comen del pasto envenenado que su pastor les pone en la boca. Resultado: ni los corderos ni las ovejas se están dando cuenta que están muriendo intoxicados.

La muerte espiritual de estos “cristianos” da lugar a que un espíritu extraño tome posesión de sus almas y este espíritu no es de Dios, pero el engaño es tan astutamente penetrado en sus mentes  y en sus corazones que ellos no se dan cuenta.

 

La Iglesia del Evangelio Cuadrangular tiene avezados maestros en desarrollar estos engaños. Son verdaderos zorros con apariencia de bonhomía y piedad.

Entre otras publicaciones que aparecen por internet, la titulada “Renuevo de Plenitud” tiene como mentor a don Serafín Contreras Galeano, a quién he mencionado varias veces en este espacio, y es un destacado miembro de la Iglesia del Evangelio Cuadrangular.

En  “El Contendor por la Fe”, con fecha 11-03-2011 hemos analizado su video “ROMPIENDO PARADIGMAS”.

Además, sugiero leer las publicaciones de El Contendor de fecha 17-05-13 de título “Dios me dijo” Partes 4ª y 5ª donde se analiza los orígenes  y “fundación” de la Iglesia Cuadrangular y comparar la biografía de Aimee Semple Mc Pherson que allí transcribimos con la que se publica en la página de internet http://iglesiacuadrangular.org.ar/i  con el título “Nuestra Historia”.

Podrá comprobar el lector que en la biografía de la página oficial de la iglesia cuadrangular hay muchas cosas, faltas graves, una doble vida de Aimee que allí no se dicen.

Seguramente, como fundadora de iglesias, está muy lejos de seguir el ejemplo del Apóstol Pablo.

La iglesia cuadrangular, una de las principales columnas del pentecostalismo, tiene una mala raíz, que da un mal árbol, que da malos frutos.

Los malos frutos son sus falsos maestros que relucen como manzanas lustrosas y apetecibles pero que como alimento envenenan el alma con el mismo evangelio light que predicó Aimee Mc Pherson.

Volviendo a la página “Renuevo de Plenitud”: don Serafín Contreras publica en ella hermosos mensajes cristianos, muchos de ellos impecables desde el punto de vista bíblico, despertando en sus lectores un profundo sentimiento de adhesión y agradecimiento.

Aquí es donde aparece el principal problema: Tenemos al zorro cubierto con la piel de oveja al frente del rebaño, ¡y nadie se da cuenta!

 

Jack Fleming (Estudios Bíblicos Maranatha) nos dice:

“......no es la cantidad de alimento adulterado lo que le hará daño, sino el resultado que producirá en su corazón. El veneno para las ratas contiene solamente un 2% que las mata, el otro 98% es para atraerlas.”

 

Cuando el zorro disfrazado aparece en escena y comienza a dar sus  conferencias “cristianas”, todos se tragan gustosamente  el 100% del “alimento espiritual” que se les brinda; tiene apariencia agradable y es apetecible.  Pero ¿alguien se dará cuenta que se están tragando el 2% de veneno mortal?

 

Opino que no es necesario que explique esta metáfora, seguramente el lector la debe haber entendido fácilmente.

 

De don Serafín, he visto una buena cantidad de videos en varios de los cuales, aparentemente, no he encontrado contradicciones con la Biblia.

Pero en otros se destaca sin ningún disimulo el adoctrinamiento DOMINIONISTA  inherente a todas las Iglesias Cuadrangulares.

 

La estrategia de estas personas, me da para pensar que los videos, no existen como versión escrita para que ningún escudriñador (como yo supongo que lo soy), no pueda colar lo que dice el disertante y encontrar ese 2% de veneno mortal.

La tarea es dificultosa: escuchar y tomar nota – escuchar y anotar – escuchar y anotar; es como la tarea de los antiguos buscadores de oro en los ríos, que ponían sus coladores en la corriente de agua para “pescar” alguna pepita que llegara mezclada en medio de los guijarros. Luego de juntar una buena cantidad de guijarros, hay que revisar para encontrar entre ellos algunas “pepitas de oro”. ¡Pero en el caso del falso evangelio en lugar de oro encontramos cianuro!

Hay videos como “Rompiendo Paradigmas Partes 1 al 7”  y  “Principios Del Reino De Dios. Partes 1 y 2”, en ellos el “zorro” se quita la piel de oveja y aparece tal cual es, manifestando claramente su posición dominionista.

 

Veamos la opinión del pastor Miguel Rosell Carrillo  referente a la doctrina Dominionista o del “Reino ahora”:

“Estableciendo el reino” es una de las máximas que más se están escuchando desde hace relativamente no demasiados años a esta parte. Por “establecer el reino” quieren decir los pseudo maestros dominionistas, que los cristianos debemos ir tomando posicionamientos de poder en este mundo “en el nombre de Cristo”, consecuentemente “cristianizarlo”, y avanzar en esa dirección para que así el Señor Jesús pueda volver, ya que muchos de ellos creen que no volverá el Señor, hasta que este mundo esté lo suficientemente preparado para Él. Esto último constituye una terrible blasfemia, ya que supedita la obra soberana de Dios, cual es el retorno de Su Hijo, a la presunta obra y mérito de los hombres.

Este entendimiento, netamente postmilenial del “Reino Ahora” (Kingdom Now), se opone frontalmente a la revelación bíblica, y entra en clara contradicción con ella.  Fíjense: Los dominionistas (y muchos lo son aunque no lo sepan), está convencidos de que este mundo se rendirá a los pies de Cristo por la acción de la Iglesia, comandada por los tremendos nuevos “apóstoles” y “profetas” (a muchos les encanta llevar esos títulos). Pero, una vez supuestamente el mundo estuviera rendido a los pies de Cristo, ¿dónde queda el prometido juicio de Dios? ¿Es acaso Dios mentiroso, o no lo son más bien todos esos falsos maestros del “próspero dominionismo”? Y digo todo esto, porque la Biblia nos asegura que Dios va a juzgar con terrible severidad a este mundo, tal y como lo hizo con aquel mundo antiguo antediluviano, como lo hizo con Sodoma y Gomorra, o con los amorreos, y luego más tarde con los asirios, etc. etc.

La voluntad de Dios a la postre, es dar gloria a sus hijos, y destruir a los impíos.

El juicio viene, no el “avivamiento y la reforma mundiales”. Hermanos, no se dejen engañar por estos falsos profetas de hoy, como lo fueron aquellos del tiempo de Jeremías, al cual odiaban, por cierto.

Los cristianos no hemos sido convocados a establecer el reino visible de Dios en este mundo que va a ser destruido por fuego en su momento (2 Pr. 3: 12). Hemos sido convocados a llevar la palabra del Evangelio a toda criatura, pero no a cambiar al hombre. Sólo el Evangelio puede cambiar al hombre, pero sólo al que cree, y eso es don de Dios (Ef. 2:8).

¿Establecer el reino de Dios?, pongámonos de acuerdo con el Espíritu Santo para que Él lo siga haciendo en nuestras vidas, en todos aquellos que somos de Cristo, porque más allá de esto ya no está en nuestras manos.

“Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno” (1 Juan 5: 19)

© Miguel Rosell Carrillo, pastor de Centro Rey, Madrid, España.
Julio 2013
www.centrorey.org

El lobo irrumpe en medio de las ovejas y corderos y los espanta, los dispersa, algunos caen y son devorados.

El zorro se instala en medio de ellas y con mucha astucia las encanta, las embelesa, casi las hipnotiza y se las devora sin que se den cuenta. Los corderos (cristianos  incipientes) son los más indefensos pues no tienen suficientemente asimilada La Palabra como para ofrecer resistencia.

Para estos corderos y estas ovejas  que se encuentran atrapados  dentro del corral del zorro predicamos desde este sitio la luz potente del Evangelio de Jesucristo, el Verdadero, para sacudirlos de su cautiverio espiritual, despertarlos del hipnotismo del zorro para que puedan escuchar en sus corazones aquella voz que viene para salvación del que la oye:

Apocalipsis 18:4  “Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; (Apo 18:5)  porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades”.

El siguiente es un comentario de Jamieson – Fausset – Brown:

Aun en la Iglesia de Roma Dios tiene pueblo: pero están en grande peligro: su única seguridad está en salir de ella en seguida. Igualmente en toda iglesia apóstata y mundana hay algunos de la Iglesia invisible y verdadera de Dios, LOS CUALES DEBEN SALIR, SI ES QUE DESEAN SER SALVOS. (**)

(**) [cristianos que aún no son salvos pero que, buscando a Dios, entraron al lugar inadecuado]

Especialmente a las vísperas del juicio divino sobre la cristiandad apóstata: como Lot fue amonestado para salir de Sodoma antes de su destrucción, e Israel para que saliera de entre las tiendas de Dotán y Abíram. Así los primeros cristianos salieron de Jerusalén cuando fue juzgada la Iglesia apóstata judía………….

“La ramera no es Roma sola (aunque lo es preeminentemente), sino también toda iglesia que no tiene la mente y el espíritu de Cristo. El falso cristianismo, dividido en muchísimas sectas, es una verdadera Babilonia, eso es, confusión.

¿Justifica lo bueno que se predica en tales iglesias que muchos “niños” (1Pedro 2:2) en la fe (corderos) permanezcan dentro de ellas?

Respecto a los miembros más antiguos de estas iglesias y aún sus pastores y obispos ¿Cómo pueden permanecer tanto tiempo en el error, tanto tiempo en la herejía? ¿Les falta sabiduría (Proverbios 1:7)? ¿No tienen temor de Dios? ¿No temen escuchar en un día no muy lejano la estremecedora y fatal frase de boca del mismo Señor: Mateo 7:23?  “Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.”

Hay que tener cuidado en cómo interpretar 1Tesalonicenses 5:21.

Comenta al respecto Jack Fleming  (Estudios Bíblicos Maranatha):

Dice 1Ts.5:21 Examinadlo todo; retened lo bueno. ¿Cómo alguien podría estar capacitado para determinar qué es lo bueno? Obviamente cuando está familiarizado con lo bueno, y eso está exclusivamente en la Biblia.”

“¿Podría alguien saber con certeza lo que corresponde verdaderamente a las Sagradas Escrituras, si es que nunca la ha leído en su totalidad? ¿No sería más lógico y sabio, que primeramente atesorara en su corazón la Palabra de Dios, para luego poder determinar con seguridad lo que tiene otra procedencia?

“Para poder determinar cuál es el alimento contaminado, necesariamente debe conocer con absoluta seguridad cual es el verdadero. Un buen cateador de vinos debe conocer con absoluta certeza cuál es el bueno, para luego concluir cuales son los malos.”

“Hoy en día se utiliza mucho este versículo para justificar la curiosidad humana de escuchar y ver programas que se "dicen" ser cristianos, pero que contienen siempre una dosis de alimento adulterado. Dicen los niños en Cristo, empinándose sobre su limitada sabiduría y exceso de auto suficiencia para verse más altos: "Es que debo examinarlo todo y retener solamente lo bueno".”

En resumen: “el zorro en medio de los corderos” es una metáfora que en la vida real tiene su símil en las Iglesias Cuadrangulares. Aquí vemos que se cumplen 2 condiciones:

1) Un “pastor” (el zorro) astuto y sutil que, con apariencia de piedad (2Timoteo 3:5)  y con gran elocuencia, cautiva a su auditorio al punto  de hacerle tragar el “sapo” de una falsa doctrina sin que ellos lo adviertan.

2) Una concurrencia (los corderos y ovejas), generalmente muy numerosa, escasamente instruida en La Palabra que, por falta de conocimiento (Oseas 4:6) está en camino de perecer porque aún no son salvos.  Leemos en la Biblia: Romanos 8:16  Porque el mismo Espíritu da testimonio a nuestro espíritu que somos hijos de Dios.   Pero en una iglesia donde no se predique la Sana Doctrina, no se puede encontrar personas en las que more el Espíritu Santo para que dé testimonio al espíritu de cada uno de que se es hijo de Dios.

Tal vez algunos que pertenecen a estas iglesias podrá venir a decirme “Yo creo en Dios, creo en Jesucristo y en el Espíritu Santo y la biblia dice que entonces soy salvo”

A lo que yo respondería con Santiago 2:19  Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.”

Los demonios creen pero no obedecen fueron ángeles que se rebelaron contra Dios.

En cambio, el que cree en Jesucristo y hace su Palabra (obedece), ése es el salvo.

Por el contrario, el mismo Jesús dijo:

 

Mateo 7:26  Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena;

Mateo 7:27  y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina.

 

Para “hacer la Palabra” debemos primero conocer la Palabra. Pero hay quienes dicen conocer la Palabra y le agregan doctrinas de hombres (dominionismo – el Reino ahora) y, peor aún, para que esto encaje ignoran una parte fundamental y preciosa  de la Escritura:

 

1Ts 4:15  Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.

1Ts 4:16  Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.

1Ts 4:17  Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.

 

Los que niegan esto (1Tesalonicenses  4:15-17) para poder agregar sus doctrinas del “Reino ahora”,  están alterando La Palabra de Dios,  están predicando un evangelio diferente, distinto al que está anunciado en La Biblia, y como dijo el apóstol Pablo:

Gál 1:8  Mas si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.

Gál 1:9  Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.

 
A los amigos que se reúnen en las Iglesias Cuadrangulares les vuelvo a hacer presentes las palabras de Apocalipsis 18:4 “Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas”

viernes, 7 de febrero de 2014

"PLANTAR IGLESIAS" (El trigo y la cizaña)

Por El Contendor


El Apóstol Pablo a lo largo de sus extensos viajes dejó el fundamento del Evangelio en las comunidades cristianas que él estableciera y muchas de las cuales crecieron hasta formar importantes iglesias en aquellas épocas.

 

Primer viaje que el Apóstol  Pablo realizó llevando el Evangelio por todo el mundo accesible en su época:

desde Antioquía, Chipre, Pafos, Perge, Pisidia, Iconio, Listra  y Derbe; y vuelta al punto de partida. Recorrido 1000 Km.

Segundo viaje: desde Tarso hasta Tróade, 1 400 km. Si se tiene en cuenta el desplazamiento por Galacia hasta su capital, Ancira, hay que añadir 526 km más. Por lo tanto, solamente dentro del Asia Menor recorrió por lo menos 1 926 km. Este cálculo de mínimos se debe a que la narración de los Hechos de los Apóstoles es muy general y se limita a decir que atravesó la región de Galacia y Misia.

Tercer viaje: de Tarso hasta Éfeso, 1 150 km. A ello hay que sumar el recorrido por la región de Galacia. En este viaje, solo dentro del Asia Menor recorrió un mínimum de 1 700 km.

A lo anterior habría que añadir los viajes por tierras de Europa y por mar, los caminos difíciles, las diferencias de altitud, etc. (Referencias: Wikipedia)

 

Se me hace difícil aceptar esta frase: “plantar iglesias” o “sembrar iglesias” que suele emplearse en las distintas vertientes del pentecostalismo. Es como si se diera a entender que esta acción denota una actividad que se realiza a granel, cuyo objetivo principal es la cantidad y no la calidad.

Es que la Sana Doctrina es difícil de “digerir” por la mayor parte de la gente; a nadie le gusta escuchar las palabras pecado, condenación, infierno etc. y mucho menos cuando el discurso pueda parecer  aludir a los escuchas.

Quizás esa sea la razón por la cual las iglesias de Sana Doctrina no pueden “sembrarse o plantarse” a granel como las otras.

Yo opino que el Apóstol Pablo no fue un “plantador” o “sembrador” de iglesias, sino que fue un fundador de Iglesias porque él personalmente puso en cada congregación el cimiento, el fundamento la principal piedra de ángulo: Jesucristo mismo (Efesios 2:20).  ¿Quién como Pablo para fundar Iglesias? Su trabajo fue más que arduo.

 2Co 11:23  ¿Son ministros de Cristo? (Como si estuviera loco hablo.) Yo más; en trabajos más abundante; en azotes sin número; en cárceles más; en peligros de muerte muchas veces.

2Co 11:24  De los judíos cinco veces he recibido cuarenta azotes menos uno.

2Co 11:25  Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado como náufrago en alta mar;

2Co 11:26  en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos;

2Co 11:27  en trabajo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez;

2Co 11:28  y además de otras cosas, lo que sobre mí se agolpa cada día, la preocupación por todas las iglesias.

2Co 11:29  ¿Quién enferma, y yo no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno?

2Co 11:30  Si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi debilidad.

2Co 11:31  El Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien es bendito por los siglos, sabe que no miento.

2Co 11:32  En Damasco, el gobernador de la provincia del rey Aretas guardaba la ciudad de los damascenos para prenderme;

2Co 11:33  y fui descolgado del muro en un canasto por una ventana, y escapé de sus manos.

 

De aquellas remotas (en el tiempo y en la distancia) Iglesias que fundó el Apóstol Pablo, hoy recibimos “la  Fe que ha sido una vez [y para siempre] dada a los santos”. Estas son las que ahora metafóricamente son el trigo de la parábola del trigo y la cizaña.

Recordemos la parábola:

 

Mat 13:24  Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo;

Mat 13:25  pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue.

Mat 13:26  Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la cizaña.

Mat 13:27  Vinieron entonces los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña?

Mat 13:28  El les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos?

Mat 13:29  El les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo.

Mat 13:30  Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero.

 

Mat 13:36  Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la casa; y acercándose a él sus discípulos, le dijeron: Explícanos la parábola de la cizaña del campo.

Mat 13:37  Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre.

Mat 13:38  El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del malo.

Mat 13:39  El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del siglo; y los segadores son los ángeles.

Mat 13:40  De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego, así será en el fin de este siglo.

Mat 13:41  Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,

Mat 13:42  y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

Mat 13:43  Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.

 

Vemos que el Señor lo dice: “El campo es el mundo”.

Muchos explican esta parábola diciendo “el campo es la Iglesia”, para inferir que el trigo y la cizaña, en el seno de la iglesia, serían los cristianos nacidos de nuevo (trigo) y los cristianos nominales (cizaña). Estos dos tipos de cristianos están mezclados en la iglesia y no se pueden diferenciar unos de otros hasta que llega el momento de la siega cuando se los puede diferenciar por el grano (fruto).

Pero al decir “el campo es el mundo”, el concepto es más amplio y va más allá del territorio de la iglesia.

Además tengamos en cuenta que la explicación comienza con: “El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre.”

Yo lo diría así: el Señor sembró en cada cristiano genuino la buena semilla de la Palabra, estos son “los hijos del reino” y al congregarse dan lugar a las iglesias de Sana Doctrina.

Por otro lado Satanás, elige a los muchos individuos inescrupulosos, avaros y codiciosos que andan por el mundo, para poner detrás de cada uno de ellos a sus demonios predilectos para sembrar en cada persona la semilla de la cizaña que es el falso evangelio; éstos son “los hijos del malo”

Éstos son los “líderes” que plantan a granel sus falsas iglesias por todo el mundo y vistiéndose de “ángeles de luz”, como el mismo Satanás; con el “cebo” de sus milagros y “sanaciones” atraen a los desprevenidos que creen en el falso evangelio que ellos les predican.

Pero el Señor no nos ordena que arranquemos la cizaña antes de la siega: “Se rechaza la propuesta de los criados [de arrancar la cizaña], que es reemplazada por la decisión del Señor de la casa. Esta decisión ha de respetarse, es decir, la cizaña y el trigo han de permanecer juntos hasta la siega. Toda separación y juicio antes de tiempo es una intromisión en el plan del Señor de la casa. Él se ha reservado el juicio. Soporta la cizaña y también el perjuicio que causa al trigo. Cuanto más lejos del hombre esté esta manera de pensar, tanto más ha de aceptarla. Esta decisión no se revoca.”(Comentario bíblico ).

 

En mi opinión, tanto han proliferado en el mundo las iglesias del falso evangelio (la cizaña), que el Señor del campo advierte, a los cristianos de Sana Doctrina, que no desperdiciemos esfuerzos con la esperanza de erradicarlas; Él, llegado el tiempo de la siega, (el fin de los tiempos), enviará a recoger “de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,  y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes”.

 

Pero mientras llega este tiempo ¿debemos quedarnos cruzados de brazos?

¡NO! Decididamente ¡NO!.

Los que amamos la Palabra de Dios, al Verbo que se hizo carne y habitó entre nosotros (Juan 1:14), aquél en quién solo en Él tenemos salvación, no podemos ni debemos quedar indiferentes mientras los enemigos, los hijos del malo, “plantan iglesias” de falsa doctrina donde se albergan los cristianos nominales, algunos o muchos de los cuales han sido seducidos y/o engañados por promesas de sanidad, prosperidad etc. 

Personas que llegan cargadas con sus problemas, con sus necesidades físicas y espirituales con sus carencias de Dios, faltos de fe, desesperados y desesperanzados; vienen con todas estas cargas buscando descanso en Cristo pero se encuentran con un falso maestro, un falso Cristo, un falso espíritu.

Pero la falta de “defensas espirituales” (conocimiento de la Palabra),  propicia que estas personas sean presa fácil para contraer la enfermedad espiritual que produce el  evangelio “light” y las toxinas que envenenan el alma; el evangelio de la prosperidad los vuelve ambiciosos, codiciosos, soberbios (“si somos hijos del Rey, debemos vivir como reyes, vestir como reyes, comer como reyes, etc.”).

No está de más recordar (a propósito de esto último), la publicación de El Contendor de fecha jueves 9 de junio de 2011cuyo título es “Aquiles Azar- Radiografía de su video Expandiendo nuestra visión”. Transcribiré algunos párrafos de ese discurso pronunciado por Aquiles Azar ante un auditorio multitudinario  de personas que a todo contestaban con  amén y ¡aleluya!

Este es el mejor ejemplo del evangelio de la prosperidad predicado por un falso siervo de Dios. Transcribo entre […] algunas observaciones mías que hacen más vívido el relato.

 

“………….¿Por qué no cambias esa actitud y empiezas a tener fe para que DIOS TE DÉ EL DINERO PARA PAGAR TODO LO QUE TENGAS QUE PAGAR? [gritando en forma desaforada] ¡¡¡ AEEEEEEEEE DIOS ES PODEROSO PARA DARTE DINEROOOOOOOOO!!!! [grito bestial y ovación de la gente]. [Sigue gritando:] ¿Hay alguien aquí que pueda cambiar su visión? dios es poderoso para darte lo que cuesta la casa, él es poderoso para darte lo que cuesta el carro (automóvil), él es poderoso para darte lo que cuesta la ropa, él es poderoso para darteeeeeeee!!!!

……………….Estás con el baratillo, pero no tienes fe para la provisión, y vas a una tienda y te gusta una buena corbata, y te gusta una buena camisa, y te gusta un buen traje, y te gustan unos buenos zapatos, [con énfasis] ¡¡¡es lo que te gussssta!!!, ¡es tu estilo! ¡es tu gusto! ¡EL GUSTO DEL REINO!, pero dices ¡ay! No me lo puedo llevar porque no está en baratilla. ¡Deja de ir al baratillo donde está todo el mundo: ¡Yo lo vi primero! -¡no, no! Yo lo vi primero.

…………………..Quisiste ir a un buen restaurante a comer una buena comida; te vestiste muy bien, llegaste allá, te dieron la carta y empezaste a mirar la columna de la derecha.

La columna de la IZQUIERDA siempre tiene los ALIMENTOS. La columna de la DERECHA siempre tiene los PRECIOS. Y antes de mirar lo que quieres comer, miras la columna de la derecha donde están los precios,  ¡¡Yo no miro esa columna, yo miro la columna de la izquierda!! Porque yo quiero comer lo que quiero comer y voy a servirme y voy a comer y me voy a alimentar porque mi dios es el dador de todo pan y yo comeré del pan y del bien de la tierra!!

[El público ovaciona de pie con los brazos en alto] y si es lo que quiero comer ¡lo voy a comer! Porque mi dios me provee de todo lo que necesito.    ¡Cambia esa mentalidad!, la mentalidad de baratillo, la mentalidad de precios bajos, la mentalidad de dónde están las oportunidades para comprar, cambia tu mentalidad, dios es poderoso para subirte y para llevarte a otro nivel.

 

El discurso es mucho más extenso pero, por lo expuesto hasta aquí, tenemos material más que suficiente para quedarnos atónitos escuchando aquel evangelio del que nos advirtió el apóstol Pablo: Gálatas 1:8-9  Mas si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.  Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.

  

 

 

Toda esta gente que cayó en la trampa de los “plantadores de iglesias” cuando, con los brazos en alto ovacionan y adoran ……. ¿a quién están adorando? ¿a quién están ovacionando?

A estas personas les tenemos advertir que se están dejando gobernar por el rey de este mundo (Satanás) que es el enemigo del Rey de Reyes (Jesucristo). Debemos  ayudarlos a discernir, a distinguir entre el evangelio espurio que ellos recibieron de “los hijos del malo” en contraposición con el Evangelio Verdadero que les predican los “hijos del reino”.

¿Se podría usted imaginar al Señor Jesucristo frente una multitud, lanzando un discurso como el que acabamos de transcribir?

……¡Pues, yo tampoco!

Seguramente nuestro esfuerzo evangelizador no alcanzará para despoblar una mega iglesia de su multitud de falsos creyentes. Pero, con que logremos rescatar a unos pocos para llevarlos a los pies de Cristo, habrá gozo en el cielo: “Lucas 15:7  Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento”.

 
A aquellos que prefieren quedarse en las iglesias “plantadas” por los hijos del maligno, creyendo en un evangelio light que se acomoda a sus gustos, les llegará el momento de la siega para ser echados en el horno de fuego donde será el lloro y crujir de dientes.